Cuentos
Esto eranse que se eran unos seres diminutos, con sus patitas largas, sus huesecillos insignificantes, sus rostros delante del torso y hacia los lados, los ojos. Habitaban en zonas húmedas, pues necesitaban el agua para vivir.
Sucedió una vez
que una colonia de estos seres, habitantes de un pozo blanco del cortijo más
lejano, se secó.
Los insectos lloraron y lloraron tanto que
volvió a llenarse el pozo, pero apenas duró unos días, pues la humedad perdida
era la humedad requerida para sus cuerpecitos delgados.
Decidieron mandar
un comando a la ciudad, para pedir al resto de
bichitos que donaran algo de llanto, de sangre, o de babas, algo líquido
en conlusión. Pero en la ciudad se lo negaron, no les
parecía taaan importante.
Entonces se les
ocurrió probar con Dios, ya que algunos
“también” eran hijos suyos.
Y Dios habló:
- Hijitos, si dependieran de mi esas cuestiones
de la Tierra ¿creen que yo sería tan cabrón para dejarla morir de esta manera?- Nadie contestó a
Dios.Quedaron atónitos.
- Los que llevan esos temas, hijitos, son los Gestores; Los Gestores de Sueños.
- Los que llevan esos temas, hijitos, son los Gestores; Los Gestores de Sueños.
Con su misma cara
de desconcierto, pero algo más seca, los bichejos fueron a buscar a tales
Gestores.
Tras mucho caminar los encontraron atareados
en presas y empresas.

Pero los Gestores no morían, no desaparecían ni cedían a suplicas o amenazas, solo reían, hasta que por fin uno dijo:
- Nosotros
gestionamos los sueños de la gente, lo
que ellos desean nosotros lo ofrecemos. A aquellos que no saben lo que quieren,con mucho placer les “gestionamos las dudas”, jajaja.
Si quereis cambiar
nuestras empresas, cambiar las prioridades de las personas. Ellos son los que
cada día siguen eligiendo.
-¡Pero nosotros no
podemos cambiar los deseos de los demás!
-¿Ah No? -se
sorprende un gestor- es curioso, nosotros si pudimos.
jejeje soy noe
ResponderEliminar